No magnifiques la naturaleza de tus actos triviales, ni solemnices tu mano cuando está tendida, nadie te va a besar el anillo. No vayas de Papa, cuando aun eres monaguillo. El hombre sabio en silencio, como el árbol, dio cientos de frutos. El hombre necio, como la gallina, cacarea cien veces para dar un solo huevo
No hay comentarios:
Publicar un comentario