Páginas

miércoles, 2 de marzo de 2011

Sólo aquel que reside...

¿Quién puede desde la tormenta ver la calma?. Sólo aquel que reside en el ojo de su propio huracán, no se asusta con los cambios de las nubes. No trates pues, Maria Luisa, de atravesar la tormenta, ten valor y salta por el agujero negro de tu alma hacia esa otra dimensión, la de la calma interior; donde ningún hechizo te alcanza

No hay comentarios:

Publicar un comentario